Capítulo 1.5

Claudia, estaba temblado, no sabía el porque de tal temblor, pero temblaba. No sabía si de frío, o porque ese camarero le había puesto demasiado nerviosa. Algo. Sentía ese algo.Un escalofrío muy intenso que recorría todo su cuerpo desde sus cabellos hasta sus pies. Ese algo, era eso.Simplemente escalofrío. Leo, les ofreció la carta a cada una de las innumerables alimentos que en el Burguer se servían. Máxima observó con determinación todas las suculentas comidas:- ¡Bueno..., comenzó a pronunciar con cierto nerviosismo.- Lo primero que voy a pedir, sera... Chicken Fingers, dos colas y haciendo honor a la mesa elegida por mi una tarta de queso.-Que poco has pedido Máxima .- ¿Estás a dieta?- le preguntó con cierta extrañeza Catalina.-No, pero no me apetece hoy mucha comida, solo es eso.-dijo con cierta desgana mirando fijamente a Leo. Leo iba muy bien vestido.Con camiseta azul claro  hacia, que se le marcase un poco los pectorales, pero no demasiado , pantalones negros y zapatos del mismo color. Era demasiado agradable verle así de guapo para todas las chicas que allí había y también para Claudia que no dejaba de mirarle en   ningún momento.Catalina le apeteció para comer, dos enormes personals fries, un   brownie, mas un refresco de fresa su favorito. Claudia muy nerviosa antes de que Leo dijese nada le objetó lo que iba a pedir. Temblando y mirándole fijamente, pidió una ración de ensalada con tacos de jamón y queso,cono de patatas fritas con vasito pequeño de salsa rosa y un batido de vainilla.Lo dijo tan rápido que Leo apuntó lo más rápido posible para no perder ningún  detalle de lo que había pedido Claudia.Sin más Leo se fue diciéndoles que traería los platos lo antes posible. Las chicas miraron muy extrañadamente a Claudia. Se le notaba muy nerviosa mirando hacia los lados o hacia la ventana observando su reflejo en el.
-¿Estas bien Claudi?, te noto muy nerviosa, no será por el dinero ¿no?.-le dijo Catalina tocándole las manos que las tenía muy frías y mirándola con cierta tristeza, a lo que Claudia espetó:-No, no es eso,  que estoy muy nerviosa, debe ser eso, supongo...- Bueno pero ya sabes que estamos aquí para ayudarte en lo que te haga falta Claudi, no lo dudes nunca.-le decía mientras esbozaban las dos una enorme sonrisa que dejaba claro, lo bien que se llevaban las dos, esto hizo que Máxima que las estaba mirando desde hacía un buen rato, derramase unas lágrimas, pero de emoción. Acabaron abrazadas las dos, con música de Elvis Presley,
de fondo.